Recorriendo la ciudad de los ángeles

Hola a todos! Espero hayan tenido una gran semana como yo y que puedan disfrutar del fin de semana, que bien merecido lo tenemos. Hoy vengo a contarles de una de las ciudades más emblemáticas de nuestro país, sea por su gastronomía, su historia, su arquitectura y por toda su cultura en general. Hace muchos años que no la visitaba y me llevé una grata sorpresa, así que les traigo unas cuantas recomendaciones si se deciden a conocerla un día de estos.

Llamada por algunos la «ciudad de los ángeles», Puebla es la capital del estado que lleva su mismo nombre y cuenta la leyenda que ésta fue trazada por los mismos ángeles (de ahí el sobrenombre), fue fundada en 1531 y es uno de los mayores atractivos turísticos de la zona centro del país debido a su cercanía a la ciudad de México y a la gran cantidad de oferta cultural con la que cuenta.

Hace algunos días tuve la oportunidad de visitarla después de muchos años de no haber ido (prácticamente 10) y la verdad es que me encantó. En esta ocasión fui por un día y nos quedamos exclusivamente en el centro histórico de la ciudad, sin embargo cuenta con una gran de servicios y atracciones que van más allá de lo tradicional, desde centros comerciales hasta auditorios, el estadio, parques y hasta Africam Safari.

El centro histórico está compuesto por varios cuadros en donde pueden encontrar museos, iglesias, antiguos palacios y tiendas tradicionales, éste fue declarado patrimonio de la humanidad hace algunos años y vale mucho la pena conocerlo. Comenzaré por lo principal: cerca del zócalo podrán encontrar uno de los monumentos principales, se trata de la catedral. Majestuosa desde afuera, es una de las más importantes a nivel nacional y está dedicada a Nuestra Señora de la Inmaculada Concepción, consagrada en 1649, cuenta con varias entradas y uno de los órganos más impresionantes que he visto en toda mi vida. En lo personal me encantan los detalles que tiene cada uno de los espacios de este lugar y lo pequeño que te hace sentir al entrar, la verdad es que la han conservado muy bien y además la han modernizado de manera que los visitantes la puedan apreciar lo mejor posible.

Al rededor del centro encontrarán más templos, todos ellos con sus carácter propio pero con el toque poblano en las coloridas fachadas. Si caminan un par de cuadras sobre la avenida 2, podrán llegar al museo Amparo, el cual cuenta con exposiciones de arte prehispánico, virreinal, moderno y contemporáneo, las instalaciones son muy modernas, accesibles, cuentan además con un servicio de cafetería y una tienda con libros de arte, fotografía y gastronomía. El costo de entrada es de $35, por lo que creo que pueden pasar un buen rato y conocer más de la historia de la ciudad.

Ahora bien, hay un par de lugares bastante famosos que no te puedes perder y que son una tradición en el centro: El callejón de los sapos y La pasita. El primero, es una famosa calle donde podrán encontrar tiendas con artesanías, un tianguis de antigüedades, arte y algunos cafés y bares. El ambiente en esta calle es bastante bohemio y alegre, los colores de las casas y los locales le dan un toque digno de fotografiar, así que se los recomiendo ampliamente. La pasita por otro lado es una cantina que se encuentra a pocos metros de los sapos, inaugurada en 1916 es una tradición poblana y reconocida a nivel internacional debido a su bebida insignia: la pasita, la cual es un licor hecho de pasas de manera artesanal y que va servido con un cubito de queso, aunque hay de diversos sabores en caso de que quieran experimentar. La cantina en sí es un museo viviente y las bebidas definitivamente no las encontrarán en otro lugar, así que pasar por aquí es prácticamente obligado.

Bueno después de platicarles de todos estos lugares del centro seguramente se preguntarán ¿cómo está la movilidad? La accesibilidad en general es más que buena en todas las calles del centro, una de las grandes ventajas es que las banquetas se encuentran al nivel de la calle, por lo que no hacen falta rampas, además que el piso en general se encuentra en muy buenas condiciones por lo que no hace falta esquivar hoyos ni coladeras como en otras ciudades. Todos los templos que visité, cuentan con una entrada con rampa instalada, por lo que eso también facilita conocer los monumentos, además que las calles y explicaciones de cada lugar histórico se encuentran también en lenguaje braille (lo cual casi no he visto en ningún lugar de México) y hay guías en el piso para las personas con debilidad visual. Hay una gran cantidad de estacionamientos públicos en los cuadros alrededor del centro, por lo que encontrar un lugar en auto tampoco será un problema. Salvo algunos establecimientos que cuentan con escalones en la entrada, la movilidad aquí es de 10.

Tal vez sienten que algo le falta a esta reseña, pero no se preocupen, me falta lo más importante de las recomendaciones: ¿dónde comer? Puebla tiene la autoría de algunos de los platillos más típicos de todo México, así que probar alguno de estos aquí es toda una experiencia para el paladar. Como sabrán, nos encontramos en plena temporada de chiles en nogada, así que después de buscar recomendaciones llegamos a Casa Reyna, un hotel boutique que ofrece platillos tradicionales de la región.

Estar en Puebla y no comer mole poblano podemos considerarlo casi un delito, así que de entrada les recomiendo las chalupas con mole poblano, las cuales no necesitan más que un poco de pollo y ajonjolí para darte una buena probadita de este delicioso platillo. Si van en esta temporada, por supuesto que tienen que probar el chile en nogada, hecho con ingredientes locales y de manera 100% artesanal cuenta incluso con un certificado de autenticidad, les prometo que este manjar no los va a decepcionar. La verdad es que todos los platillos se antojan, pero si se sienten perdidos, les recomiendo también la sopa de tortilla y los tacos de molleja, los cuales vienen acompañados de guacamole y pico de gallo con tortillas hechas a mano. El postre no podía faltar, y para seguir en lo tradicional, probé el arroz con leche (delicioso por cierto), sin embargo hay una gran cantidad de opciones para cerrar con broche de oro. Aquí también pueden realizar eventos privados y por supuesto hospedarse, así que si llegan a visitar Puebla les diría que es una gran opción, además que cuentan con rampas en todo el edificio, lo cual se agradece en cuanto a movilidad, sin embargo la llegada puede ser un poco complicada si no es en automóvil.

Pues esa fue mi visita por Puebla, espero se hayan quedado con ganas de visitarla y probar un poco de su cultura.

Gracias por leerme como cada semana, no olviden dejar sus comentarios y recomendaciones para visitar más lugares!!!

Atte: Gato

P.D. Pueden ver más fotos de mis visitas a todos estos lugares en Instagram: el_gato_con_ruedas

1 comentario en “Recorriendo la ciudad de los ángeles

  1. Avatar de Rockdolfo JBRockdolfo JB

    Gato…fue una excelente reseña, y la visita….bueno…!!! que se repita =) TQM

    Me gusta

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.