El gato en Berlín

Hola a todos! Muy feliz año! Espero que hayan pasado felices fiestas y que estén listos como yo para comenzar este año. En lo personal, yo nunca imaginé que mi fin de año sería tan agitado y divertido, así que poco a poco les iré contando de algunos lugares nuevos que descubrí y mis recomendaciones por si algún día se dan una vuelta por estos lares.

En esta ocasión, les platicaré de uno de mis nuevos descubrimientos, una ciudad emblemática por su historia, famosa por haber sido parte de la guerra más importante del último siglo y por su impresionante organización y capacidad para regenerarse. Se trata de la capital alemana: Berlín.

Si bien era una ciudad que me interesaba conocer, debo decir que no se encontraba hasta arriba de mi lista, no porque no me llamara la atención, si no porque simplemente no había pensado en lo interesante que podía ser este lugar. Por azares del destino, este se convirtió en mi destino navideño, así que les platicaré un poco de lo que conocí en esta impresionante ciudad.

Tal como nos lo mencionaba un guía al comenzar un recorrido, Berlín no es necesariamente como otras capitales europeas que te pueden dejar sin habla por la belleza de su arquitectura o por la cantidad de obras de arte que ves en las calles (tal es el caso de Roma, París o Bruselas por ejemplo), sin embargo es una ciudad que te deja huella, te muestra un poco de su pasado y cómo aprendieron de éste para ser mejores.

Una de las primeras cosas que muchos me preguntan al contarles que fui a Alemania en esta temporada es: ¿y qué tal el frío? Y pues ¿qué les digo? Siendo mexicana y viviendo en una zona bastante templada del país les puedo decir que en efecto, se muere de frío en invierno por allá. Definitivamente nuestros amigos europeos están mucho más preparados que nosotros para soportar este clima, no solo a nivel genético si no también con ropa e infraestructura que les ayuda a pasar bien el rato, mientras que nosotros, por más que queramos prevenirnos, es muy probable que nos encontremos cubiertos a más no poder aunque la temperatura esté a 1 o 2º. Mi recomendación para esto es comprar ropa térmica (la más gruesa que encuentren), incluyendo calcetines y pantalones, lleven guantes, gorro y bufanda para evitar respirar el aire frío y en caso de no conseguir esa ropa en su lugar de origen, esperen a comprar algo allá que tienen mucha más variedad y probablemente hasta de mejor calidad. Nada más un tip, si van en fechas navideñas como me tocó con mis amigos, traten de hacer las compras antes del 24 de diciembre o encontrarán todo cerrado hasta el 27, pues en Alemania se festeja nochebuena, navidad y segundo día de navidad, 3 días en que las ciudades prácticamente se mueren.

Puerta de Brandenburgo (Navidad)

Y bien ¿qué visitar en Berlín? La verdad es que es una ciudad en donde el principal atractivo, son sus museos y monumentos históricos, así que les haré una breve lista de los lugares que creo que no se pueden perder:

  • La puerta de Brandenburgo: probablemente para los alemanes sea el principal símbolo de la ciudad, pues es uno de los monumentos más antiguos que se conservan y ha sido testigo de diferentes épocas y batallas. Se encuentra justo en el centro de la ciudad y muy cerca de otros edificios importantes, así que diría que es un buen punto de referencia para comenzar un pequeño tour.
  • El parlamento (Reichstag): localizado a unos metros de la puerta de Brandemburgo, este edificio también es uno de los más antiguos de la ciudad a pesar de que ha sufrido diversas modificaciones con los años. Para entrar, deben hacer una reservación en internet y llevar su confirmación (que reciben por mail) junto con su pasaporte para poder entrar. Para más información, pueden visitar esta página. Vale mucho la pena el recorrido.
  • El monumento a los judíos: famoso hace algunos años por la polémica que causaban las fotos de los visitantes en las que parecía que se encontraban en una pasarela de modas y no en un monumento en donde se debe guardar un máximo respeto a las personas que perdieron la vida en la guerra más dura de la humanidad. Este monumento se encuentra al aire libre y como dice el arquitecto, también es libre a la interpretación de cada quien. Los invito a que lo recorran a través de los diferentes pasillos y se dejen envolver por el ambiente que provocan las gigantescas estructuras a su alrededor.
  • El muro: si bien el muro fue derrumbado a inicios de los años 90’s, se conserva una parte de éste mejor conocida como East Side Gallery, en la cual podrán apreciar diferentes murales de artistas de diferentes países en los que principalmente se expresa la lucha por los derechos humanos. Si pueden tomar un tour para conocer más sobre cómo era la vida en los diferentes lados del muro, se los recomiendo, creo que es uno de los temas más atractivos históricamente hablando.
  • El museo de los judíos: probablemente mi parte favorita de la ciudad, es una estructura relativamente nueva que cuenta con diferentes exposiciones temporales y una fija que representa al museo: la dedicada a los judíos. Es impresionante cómo la arquitectura de este lugar está hecha para provocarte sensaciones que evoquen a algunos de los momentos más duros de la historia, toda la simbología del edificio me dejó sin habla, así que creo que es una visita obligada si pasan por esta ciudad.
  • La isla de los museos: desafortunadamente no pude conocer los museos de este lugar porque las entradas se encontraban en reparación y no había acceso para silla de ruedas, sin embargo muchas personas lo recomiendan así que espero poder visitarla algún día.
Parlamento de Alemania (Reichstag)

Como verán, hay bastantes opciones para conocer en Berlín, así que les prometo que aburridos no estarán, pero ahora hablemos la segunda pregunta que todos hacen ¿y la comida qué tal? Bueno no puedo decir que la comida alemana es mi favorita pero tampoco es desagradable, creo que los mejores lugares que encontramos para comer fueron de comida extranjera y hay de varios presupuestos, por lo que les aseguro que podrán tener una buena comida en la ciudad sin gastar tanto, pero ya le dedicaré otra entrada exclusiva otro día solo al tour gastronómico.

Nuestra pregunta de siempre ¿cómo está la movilidad aquí? me la respondieron muchas personas desde antes de ir y aún así lo comprobé al llegar: es una de las mejores ciudades para personas en silla de ruedas. Todas las calles cuentan con rampas, el transporte público se encuentra adaptado y las personas respetan los espacios, hay servicios sanitarios adaptados también en las estaciones de tren, de metro e incluso en la calle. Los hostales también cuentan con habitaciones adecuadas, basta con pedirlas al momento de hacer la reservación y explicar cuáles son las necesidades del huésped. Las tiendas, museos y edificios cuentan con las adecuaciones necesarias y de hecho es uno de los lugares donde más personas he visto con diferentes tipos de sillas, eléctricas, manuales, pequeñas, portátiles, con andadera y más. Es un gran ejemplo de ciudad con accesibilidad universal y eso es algo que además de aplaudir, nos puede servir como ejemplo.

Sé que me extendí mucho en esta ocasión pero un destino como éste no podía merecer menos palabras. Les estoy compartiendo unas fotos por aquí pero les recuerdo que pueden encontrar más en mi instagram: @el_gato_con_ruedas

Monumento a los judíos

Gracias por leerme como siempre! Espero sus comentarios y recomendaciones para conocer más lugares, ¡que tengan un gran inicio de año!

Atte. El gato con ruedas

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