¡Hola a todos! ¿Cómo están? Ya a un año de vivir en este mundo de pandemia, me viene un poco de nostalgia porque extraño salir a conocer nuevas ciudades, comer en lugares nuevos, ver a mi familia y amigos… en fin. Aún con todo esto, me sentí inspirada para hablar de un tema con el que seguro muchos usuarios de silla de ruedas nos sentimos identificados dentro de casa.
Hace poco, decidí comprarme un escritorio, para tener más comodidad mientras trabajo ahora que paso mucho más tiempo en casa, así que como buena «millennial» en medio de la pandemia, comencé a buscar por internet en diferentes mueblerías (como Ikea, Gaia) y tiendas de comercio electrónico (mi buen amigo Amazon) y me di cuenta de lo insegura que me sentía de dar click al botón «Comprar» por una simple razón: ¡no estaba segura si las medidas eran adecuadas para mi silla!
Así es amigos, hoy les contaré algunas de las cuestiones que me he topado al momento de comprar o utilizar muebles en casa y que debido a su diseño, algunas veces resultan incómodos, poco accesibles o simplemente no podemos utilizar. Claro que las necesidades van a depender de cada persona, pero seguramente algunos me entenderán que hay características que quisiéramos saber antes de comprar un mueble, sobre todo cuando no podemos ir a la tienda físicamente.

Si bien hoy hay sillas de ruedas mucho más compactas y ligeras e incluso cómodas (con el cojín y el respaldo adecuado), hay veces que también queremos usar otra silla o pasarnos a un sillón. Con maña y con fuerza vaya que es posible pasarse a prácticamente cualquier lugar, pero para practicidad es verdad que requerimos que estos muebles no varíen tanto de altura con respecto a nuestra silla, que la superficie donde vayamos a estar sea lo suficientemente firme para no hundirnos y que sea lo más fija posible.
Las mesas son todo un tema, esto lo descubrí desde la primera vez que llegué a mi recámara a intentar usar mi escritorio, ¡en el que no entraba con mi silla! ¿Cómo? Bueno las sillas de ruedas normalmente nos hacen subir un poco ya que nuestros pies no están directamente en el piso y nuestras rodillas deben estar en un ángulo de 90º. Entonces bueno, no les cuento la cantidad de restaurantes y oficinas en las que simplemente no entro con mi silla y debo estar del lado o en una orilla para poder hacer uso de esta. ¿Qué necesitamos saber? La altura y el ancho de la mesa ¡OJO! Todas las tiendas te indican estas medidas normalmente, pero en realidad no siempre toman en cuenta el ancho del material con el que está hecho el mueble, casi siempre miden el total, entonces termina siendo un poco dudosa la medida para nosotros. Aquí les pongo un ejemplo de lo que nosotros necesitamos saber.

En el baño, pues el tema de los muebles puede variar mucho de acuerdo a las necesidades de cada usuario. He platicado con algunos amigos y la verdad es que todos hacemos cosas diferentes, pero si creo que hay algunos temas básicos que nos ayudan a la hora de decidir: medidas (naturalmente), en todos los sentidos, ancho, alto, largo de TODO. Los mecanismos: aún me sorprende que hay sanitarios para personas con discapacidad en lugares públicos que se activan con el pie… (es una mala broma, no???), así que es bueno asegurarse que el WC funciona con un botón o una palanca (a menos que quieras un sensor en tu casa, creo que son las mejores opciones), que estos mecanismos no sean tan complejos y en qué parte están colocados, pues a veces una pequeña tarea se puede hacer muy complicada. Lo mismo con las llaves del agua, ¡qué tan difícil es abrirlas para alguien que no tiene 100% de control de movilidad superior? Puede parecer mucho en qué pensar pero más que nada se trata de mapear la actividad del usuario.
Los muebles con cajones, gavetas o puertas. Probablemente uno de los temas en los muebles con los que ya nos acostumbramos a lidiar las personas en silla de ruedas, pero que podrían ser reemplazados con otras soluciones en algún momento. Las puertas corredizas son una gran opción en cualquier espacio (cocina, baño, recámara, sala) y nos facilita mucho la vida a quienes usamos silla de ruedas. Otra opción es tener los espacios abiertos (que no a todos les gusta pero es cierto que es práctico), a mi además me ayuda a mantener mis cosas ordenadas porque claramente no quiero que a la vista esté todo amontonado.

Ejemplo de puerta corrediza 
Otra puerta corrediza 
Mueble abierto
En las casas y departamentos es común que encontremos pequeños desniveles (sobre todo si hay algún patio, jardín, cuarto de servicio e incluso en la entrada). Lo primero que pensamos es que necesitamos mandar a hacer una rampa o crear una instalación para lograr pasarlo, y si bien es una solución adecuada (sobre todo tomando en cuenta que es tu casa), ¿qué pasa si no quieres hacer algo permanente porque no es tu lugar permanente de residencia? Bueno pues tenemos la ventaja de que ahora existen muchas rampas móviles de diferentes materiales y tamaños que pueden ser una buena opción. Yo hoy les quiero recomendar esta en especial que encontré en Amazon y me sorprendió porque el material es super ligero (tanto como para que yo misma pueda levantarla y moverla a otro lugar) y muy resistente. Estéticamente no está nada mal tampoco y nuestro buen amigo Amazon nos la hace llegar a cualquier lugar sin problema.


Seguramente hay otras soluciones y otras características que no menciono aquí, así que ¡compártanme su experiencia!
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Atte. El Gato con Ruedas